Retrovisores Calefactables: Tu mejor aliado contra el mal tiempo
Un día de lluvia o una mañana fría de invierno. Te subes al coche, arrancas y te das cuenta de que no ves nada por los espejos retrovisores. Están completamente empañados o, peor aún, cubiertos por una fina capa de hielo.
Tener que bajar la ventanilla para limpiarlos con la mano es un engorro y una pérdida de tiempo. Para solucionar este problema tan común, se inventaron los retrovisores calefactables, un extra de confort y seguridad que cada vez es más habitual.
En HEYrenting, queremos que conozcas cada detalle que hace tu conducción más fácil y segura. ¡Vamos a ver cómo funciona esta tecnología!
Ver ofertas de renting¿Qué son y para qué sirven los retrovisores calefactables?
Los retrovisores calefactables son exactamente lo que su nombre indica: espejos exteriores que tienen la capacidad de generar su propio calor.
Su única y vital misión es garantizar una visibilidad perfecta hacia atrás en todo momento, eliminando rápidamente el vaho, las gotas de lluvia o incluso el hielo que se acumula en su superficie. Son un elemento de seguridad activa, ya que una buena visibilidad es fundamental para realizar cualquier maniobra.
¿Por qué son cada vez más importantes?
Los coches modernos tienen retrovisores cada vez más grandes y con formas aerodinámicas. Esto es bueno para la visibilidad y la eficiencia, pero también hace que acumulen más gotas de agua y suciedad. Por eso, un sistema que los mantenga limpios y despejados es más útil que nunca.
¿Cómo funcionan? La sencillez de una resistencia
El mecanismo es muy similar al de la luneta térmica trasera que desempaña el parabrisas posterior.
Detrás del cristal del espejo se encuentra una fina lámina con una resistencia eléctrica. Cuando el sistema se activa, una corriente eléctrica pasa a través de esta resistencia, que se calienta y transfiere ese calor de forma uniforme por toda la superficie del espejo. Este calor suave es suficiente para evaporar la condensación y derretir el hielo en pocos minutos.
La guía definitiva: ¿Cómo activo los míos?
Esta es la duda más común. No hay un único método, pero casi todos los coches usan una de estas tres formas. ¡Seguro que la tuya es una de ellas!
¿Cómo sé si mi coche los tiene?
La forma más fácil es buscar el pequeño icono de desempañado grabado en el propio cristal del retrovisor, normalmente en una de las esquinas. Si no lo ves, consulta el manual de tu vehículo o revisa el mando de ajuste de los espejos en busca del símbolo correspondiente.
La ventaja HEYrenting: Equipamiento superior sin coste extra
Hace años, los retrovisores calefactables eran un extra de lujo, reservado para los coches de gama alta o los famosos «packs de invierno», que suponían un sobrecoste considerable.
Hoy, gracias a la democratización de la tecnología, muchos coches de segmentos más accesibles ya los incluyen de serie en sus acabados intermedios y altos. El renting es la forma más inteligente de acceder a estos vehículos modernos y bien equipados.
Con HEYrenting, puedes disfrutar de un coche nuevo con un equipamiento de confort y seguridad muy completo, incluyendo los retrovisores calefactables, por una cuota mensual fija. Es la tranquilidad de saber que no renuncias a nada, y si se averían, la reparación está incluida. ¡Así de fácil!
Ver ofertas de rentingPreguntas frecuentes sobre los retrovisores calefactables
Son los espejos retrovisores exteriores que incorporan una resistencia eléctrica interna. Al activarla, generan calor para desempañar el cristal, eliminar gotas de lluvia o derretir el hielo, asegurando una buena visibilidad.
Existen tres formas comunes: 1) Pulsando el mismo botón que activa la luneta térmica trasera. 2) Girando el mando de ajuste de los espejos a una posición específica con el símbolo de desempañado. 3) De forma automática en algunos coches cuando la temperatura exterior es baja.
Busca un pequeño icono de un rectángulo con tres flechas curvas grabado en el propio cristal del espejo. Si no está, revisa el mando de ajuste de los retrovisores o el manual del vehículo.
No, su consumo es muy bajo y está diseñado para no afectar al rendimiento de la batería. Además, la mayoría de los sistemas se desactivan automáticamente pasados unos minutos para optimizar el consumo energético.
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